Los llamados Puntos Violeta instaurados en las alcaldías Benito Juárez, Álvaro Obregón y Miguel Hidalgo, fueron inaugurados como centros de apoyo y atención a las mujeres y niñas víctimas de cualquier forma de violencia.

A pesar de que se anunciaron como una estrategia de gran envergadura y en la que incluso, se invitaría a grupos empresariales a sumarse a atender este flagelo social (en una segunda etapa), lo cierto es que los Puntos Violeta son cascarones sin contenido ya que no cuentan con el personal capacitado ni protocolos de atención a las víctimas. Es decir, se quedaron en buenas intenciones o como la misma alcaldesa de Álvaro Obregón dijo que están “en estatus de proyecto”.

La violencia contra las mujeres no requiere de escenografías espectaculares ni de puestas en escena que sirven solo para la foto. La atención a las mujeres y las niñas que han vivido o viven cualquier tipo de violencia, requiere de:

• Estrategias claras y contundentes que en primera instancia cuenten con la profunda convicción y compromiso de las autoridades para atenderla y terminar con la impunidad; 
• Destinar recursos económicos con objetivos concretos y destinados a áreas específicas.
• El compromiso con el cumplimiento al acceso a la justicia a las víctimas y la lucha contra la impunidad.

Como grupo parlamentario nos preguntamos por qué gastar recursos públicos en un trabajo que se puede fortalecer con diálogo, coordinación y colaboración con las instancias que están haciendo un enorme trabajo en torno a la violencia contra las mujeres y las niñas, como:

• La atención en la línea SOS Mujeres *765 y que cuenta con 166 operadoras especializadas en atención de emergencias con perspectiva de género las 24 horas.
• Las Lunas que son las Unidades de atención y prevención de la violencia de género de la Secretaría de las Mujeres y que cuentan tanto con asesoría jurídica como psicológica.
• Las 136 Abogadas de las Mujeres que se encuentran en 53 Agencias del Ministerio Público.
• La Red de Mujeres por el Bienestar que realiza visitas domiciliarias para detectar casos de violencia de género.

Estas iniciativas que ha impulsado el gobierno de la Ciudad de México son la muestra clara del compromiso que tenemos en la lucha contra la violencia hacia las mujeres y las niñas, la justicia, la reparación y contra la impunidad.

Para nuestro grupo parlamentario, la violencia contra las mujeres y las niñas no es un tema político ideológico, es un tema que implica la protección integral a las víctimas.

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