La tradición navideña nos habla de tres Reyes Magos que siguieron la estrella de Belén para adorar al niño Jesús.
Sin embargo, hay una historia menos conocida sobre un cuarto Rey Mago llamado Artabán.
Según la leyenda, Artabán era un rey persa que también vio la estrella de Belén y decidió seguir su camino hacia Occidente para encontrar al Mesías. Sin embargo, en su viaje, se encontró con un anciano moribundo y decidió ayudarlo en lugar de continuar su camino.
Artabán le dio al anciano un diamante que llevaba consigo como regalo para el niño Jesús. Luego, continuó su viaje, pero llegó demasiado tarde para encontrar a los otros tres Reyes Magos y al niño Jesús. En su lugar, encontró a un grupo de soldados de Herodes que estaban degollando a recién nacidos.
Artabán decidió usar su rubí para salvar la vida de un niño que estaba a punto de ser asesinado. Luego, fue encarcelado durante 30 años, hasta que finalmente fue liberado y se enteró de la crucifixión de Jesús.
La historia de Artabán es una conmovedora reflexión sobre la verdadera esencia de la navidad. Aunque no llegó a tiempo para encontrar al niño Jesús, su corazón estaba lleno de amor y compasión hacia los demás.
La leyenda de Artabán ha sido adaptada en varias ocasiones en el cine y la literatura, incluyendo una película de 1985 protagonizada por Martin Sheen. Su historia sigue siendo una inspiración para muchos durante la época navideña.