En respuesta a una denuncia vecinal, el gobierno de Naucalpan llevó a cabo la clausura de un tiradero clandestino en la colonia Praderas de San Mateo. La acción se realizó como parte de la política de la administración de la presidenta municipal Angélica Moya Marín, orientada a combatir estos sitios que afectan el entorno natural.
La Dirección General de Medio Ambiente, liderada por Amaya Bernárdez de la Granja, coordinó el operativo el pasado 19 de febrero con el apoyo de elementos de la Dirección General de Seguridad Ciudadana y Movilidad. La intervención se efectuó para verificar la situación del tiradero denunciado, que operaba sin la documentación correspondiente.
Amaya Bernárdez de la Granja destacó que estos operativos son parte de un esfuerzo constante para detectar tiraderos clandestinos en el municipio. Además, se subrayó la importancia de atender las denuncias ciudadanas para preservar la naturaleza y la calidad de vida de la población.
José Luis Gutiérrez Aire, subdirector de Normatividad Ambiental, informó que el operativo se desencadenó tras una denuncia telefónica. Se elaboró una orden de visita y se verificó el predio ubicado en la calle 10 de Mayo, casi esquina con Emperadores. Se encontraron residuos sólidos de manejo especial (cascajo) y residuos sólidos urbanos, lo que condujo a la colocación de sellos de suspensión definitiva.
La Dirección General de Seguridad Ciudadana y Movilidad Seguridad informó que ocho elementos de la corporación participaron en el operativo, el cual se llevó a cabo sin incidentes ni detenidos. En casos anteriores, la administración ha colocado sellos de suspensión en tiraderos clandestinos, sancionando a los responsables, incluso cuando se violan los sellos previamente colocados.
Este esfuerzo conjunto refleja el compromiso de Naucalpan para abordar y resolver la problemática de los tiraderos clandestinos en beneficio del entorno natural y la calidad de vida de sus habitantes.
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