La Dirección de Seguridad Pública y Tránsito de Atizapán de Zaragoza ha entrenado a «Endor», un perro pastor belga malinois de nueve meses de edad, para la detección y localización de restos humanos, incluyendo cadáveres frescos y en estado de putrefacción. Este can, que forma parte de la Unidad Canina de la Policía local, es el nuevo recurso especializado en la búsqueda de personas desaparecidas o en situaciones de emergencia.

Durante su entrenamiento en el Centro de Formación Policial en la Colonia Los Cajones, «Endor» ha sido sometido a escenarios prácticos y reales, lo que le ha permitido familiarizarse con una variedad de objetos y olores, incluyendo derrumbes y deslaves. El perro es guiado por su manejador, Luis Francisco López, adscrito a la Unidad de Operaciones Especiales (UNOPES), y responde a la orden «Busca» para rastrear el aroma de los restos humanos en diferentes condiciones y superficies.

El entrenamiento de «Endor» abarca desde búsquedas a nivel del suelo hasta intervenciones en áreas elevadas, con zigzags y búsqueda entre piedras, lodo y agua. El can muestra una gran concentración y motivación en su labor, considerando la obtención de su pelota como recompensa.

El director de Seguridad Pública y Tránsito municipal, Fabián Ricardo Gómez Calcáneo, destacó que «Endor» fue seleccionado entre varios cachorros debido a su temperamento, impulsos, concentración y reacción hacia su atractor o juguete, además de su sociabilidad y falta de agresión ante situaciones de estrés. El oficial Willian Armas Cruz, encargado de la Unidad Canina, señaló la importancia de que los perros para este tipo de trabajo sean sociables y no cambien su actitud ante situaciones adversas.

«Endor» se encuentra en proceso de maduración y se espera que, a los dos años de edad, pueda colaborar oficialmente con la policía en la detección de restos humanos. Actualmente, el perro se encuentra en su etapa de entrenamiento y desarrollo de habilidades.

La incorporación de «Endor» a la Unidad Canina refuerza las capacidades de la Policía de Atizapán de Zaragoza en la detección y protección, trabajando junto a otros perros policía como «Bambino», «Lucky», «Kali» y «Hércules».

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