Por: Fernando Dávila
Hidalgo se posiciona como el estado principal para albergar cine, comerciales y videoclips en México; desde los últimos tres años se ha transformado en un imán para productoras nacionales e internacionales que buscan escenarios naturales y urbanos plasmando la identidad del país.


Entre sus paisajes han desfilado cámaras de Netflix, Prime Video, comerciales de marcas como Toyota, Adidas y Tequila Don Ramón con Luis Miguel, además de comerciales exclusivos de Apple y próximamente la película Morro que se estrenará en cines.
De septiembre de 2022 a la fecha, el estado ha registrado 62 filmaciones que generaron más de 60 millones de pesos en derrama económica y más de 2,200 empleos directos. Locaciones como Huasca de Ocampo, Mineral del Chico y Zempoala han servido de fondo para historias de ficción, documentales y campañas publicitarias globales.
La diversidad de paisajes ha sido clave: montañas, bosques, desiertos y el Valle del Mezquital ofrecen en un solo territorio escenarios muy distintos. Esta variedad ha permitido recrear desde entornos coloniales hasta montañas boscosas, lo que ha llamado la atención de productoras extranjeras que antes miraban a las grandes ciudades.
Detrás del telón hay una estrategia silenciosa: la Dirección de Promoción y Mercadotecnia de Hidalgo facilita scouting en los 84 municipios, coordina permisos de seguridad y se busca que la derrama quede en la población local:
“Queremos que contraten gasolina, catering y camionetas aquí mismo”, explicó la secretaria de Turismo, Elizabeth Quintanar. También la diputada Ana Lilia de la Vega, presidenta de la Comisión de Cultura y Cinematografía, recordó que el cine también impulsa el turismo.
“Más de la mitad de películas de 2024 fueron óperas primas; hay mucho talento joven que debemos apoyar”, afirmó al anunciar que trabajan en una legislación para atraer más producciones con certidumbre jurídica.
Con 62 rodajes en su haber y la mira puesta en nuevas alianzas, Hidalgo busca consolidarse como un destino cinematográfico de primer nivel. Desde un comercial grabado con iPhone con más de 35 millones de vistas, hasta una superproducción de Netflix en Mineral del Chico.
El estado aumenta su esfuerzo por posicionarlo en las grandes ligas de la producción audiovisual de México, pero no a partir de escenarios comunes, sino aquellos que representen la riqueza cultural mexicana y conquisten la pantalla grande.