La Unidad de Rescate Aéreo «Relámpagos» del Estado de México, que opera bajo la jurisdicción de la Secretaría de Finanzas, ha sido honrada con un reconocimiento especial por parte de la Fundación Michou y Mau, en reconocimiento a su excepcional labor humanitaria en la atención y traslado de niños, niñas y adolescentes mexicanos con quemaduras severas.

La Fundación Michou y Mau, que se dedica a brindar asistencia a víctimas de quemaduras, ha destacado el papel fundamental de la Unidad de Rescate Aéreo en la realización de su misión. Esta unidad de rescate ha demostrado un compromiso excepcional al acortar significativamente los tiempos de traslado, un factor crítico para la salud y recuperación de los pacientes. Los menores heridos son atendidos inicialmente en diversos hospitales especializados en el área metropolitana de la Ciudad de México, donde se les estabiliza y evalúa si es necesario su posterior traslado al Hospital Infantil Shriners en Galveston, Texas.

En este homenaje, no solo se expresó gratitud hacia los valientes paramédicos y pilotos, sino también hacia el personal administrativo y de mantenimiento que, con su dedicación y trabajo en equipo, contribuyen al éxito de cada operación de rescate.

El capitán Salvador de Alba, jefe de la Unidad «Relámpagos», compartió su orgullo por colaborar en la importante misión de la Fundación y resaltó la satisfacción de saber que el esfuerzo de su equipo está mejorando la calidad de vida de los pacientes que han sufrido quemaduras.

Este reconocimiento también destacó la vocación de servicio que caracteriza a los miembros del Grupo «Relámpagos» y su empatía con los pacientes. La Fundación Michou y Mau subrayó que la velocidad en el traslado es esencial para la recuperación de las personas afectadas por quemaduras, y el compromiso de la Unidad de Rescate Aéreo ha demostrado ser un componente vital en este proceso.

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