En un significativo paso hacia la sostenibilidad, el Estado de México reafirma su posición como líder nacional en la producción de árboles de Navidad. El puntapié inicial lo dio la secretaria del Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible, Alhely Rubio Arronis, al presidir el corte del primer árbol en la Plantación “La Cuesta” en Santiago Tejocotillos, Xonacatlán. Este municipio, según las autoridades locales, cuenta con vastas 157 hectáreas destinadas exclusivamente a la plantación de estas especies.

Alhely Rubio Arronis subrayó el compromiso de su dependencia en apoyar a los productores, independientemente de su escala. Ya sea grandes, medianos o pequeños, la Secretaría brinda asesoramiento y facilita relaciones para fomentar el desarrollo sostenible en la producción de árboles navideños en todo el Estado.

Acompañada por Jesús Almeida García, presidente de la Asociación de Productores de Árboles de Navidad de Xonacatlán, Juana Bricela Torres Cárdenas, dueña de la plantación “La Cuesta”, y Serafín Gutiérrez Morales, líder vecinal de la Delegación, la secretaria destacó la importancia de esta iniciativa para el crecimiento de áreas naturales y el impulso económico basado en el uso sostenible de los recursos ambientales.

En su intervención, Serafín Gutiérrez Morales enfatizó que la comercialización de árboles de Navidad no implica deforestación. Por el contrario, subrayó que por cada árbol cortado, se planta otro, y solo toma seis años para que alcance su madurez. Este enfoque no solo asegura la reposición, sino que también contribuye a la generación de aire limpio en la región.

La secretaria hizo un llamado a la ciudadanía mexiquense a elegir árboles naturales, destacando su papel crucial en la lucha contra el cambio climático. A diferencia de los artificiales, los árboles naturales pueden reciclarse y obtener una segunda vida. Este enfoque, según Rubio Arronis, es esencial dado que los árboles de plástico pueden tardar hasta 500 años en degradarse, generando una carga ambiental significativa.

En sintonía con el llamado a la sostenibilidad, los participantes coincidieron en que la adquisición de árboles naturales no solo promueve una Navidad más respetuosa con el medio ambiente, sino que también brinda a las familias la oportunidad de vivir la experiencia única de cortar su propio árbol a un costo accesible. Además, alentaron a impulsar el comercio local adquiriendo regalos y productos artesanales, consolidando así una Navidad que abraza la responsabilidad ambiental y el apoyo a la comunidad.

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