Con una jornada perfecta en todos los frentes, los Diablos Rojos del México empataron la serie frente a los Tigres de Quintana Roo con una contundente victoria de 17-1 en el Estadio Alfredo Harp Helú, apoyados en una ofensiva de 20 imparables, un rally de siete carreras en la octava entrada y un sólido trabajo de siete lanzadores.
Los locales anotaron en seis de las nueve entradas, destacando por su equilibrio entre bateo, pitcheo y defensa. Todos los titulares conectaron al menos un hit, anotaron carrera y ocho de los nueve bateadores produjeron. A la defensiva, los escarlatas realizaron cuatro dobles matanzas para frenar cualquier intento felino.
El abridor Deolis Guerra, en su debut con Diablos, lanzó 3.0 entradas con solo dos hits y una carrera permitida, antes de dar paso a un sólido bullpen que lanzó seis entradas sin admitir anotación. El triunfo fue para Conner Menez, mientras que la derrota recayó en Kobe Foster, quien permitió cinco carreras en 3.1 innings.
A la ofensiva, Carlos Sepúlveda ratificó su liderato de bateo en la LMB al irse de 5-3 con tres producidas y dos anotadas, elevando su promedio a .478. Francisco Mejía también brilló con tres hits, tres anotadas y tres impulsadas, mientras que Moisés Gutiérrez firmó su hit número 650 en la LMB, además de aportar tres carreras producidas.
Con la serie empatada, Diablos y Tigres se enfrentarán este domingo a las 14:00 horas en el «Diamante de Fuego». El duelo de lanzadores será entre Justin Courtney por los capitalinos y Carl Edwards Jr. por los caribeños.
