Con el objetivo de reducir el impacto ambiental de la basura electoral, la diputada Adriana María Guadalupe Espinosa de los Monteros presentó una iniciativa que reforma el Artículo 400 del Código de Instituciones y Procedimientos Electorales local.
La propuesta busca obligar a partidos políticos y candidatos independientes a utilizar materiales compostables, biodegradables y reciclables en su propaganda impresa.
Basura electoral: un problema creciente
Espinosa de los Monteros destacó que, durante las elecciones de 2024 en la Ciudad de México, se generaron entre 25 y 30 mil toneladas de desechos electorales, más del doble que en 2018. Este aumento no solo agrava la contaminación visual, sino que también afecta la infraestructura urbana, como el drenaje, al obstruir el flujo de agua de lluvia y provocar inundaciones. Además, la basura electoral en rellenos sanitarios libera gases peligrosos, como metano, que incrementan el riesgo de incendios y representan un peligro para la salud.
Materiales ecológicos y responsabilidad de los partidos
La iniciativa propone que toda propaganda impresa sea fabricada con materiales compostables, libres de sustancias tóxicas, y cumpla con las normas ambientales locales y federales. Asimismo, los partidos y candidatos deberán presentar un plan de reciclaje que asegure una disposición final adecuada de estos materiales tras las campañas.
Retos y compromiso ambiental
La diputada enfatizó que la regulación es urgente para mitigar los daños ambientales y responsabilizar a los actores políticos de cumplir con normativas que reduzcan el impacto ecológico. «El uso desmedido de propaganda electoral afecta no solo al medio ambiente, sino también la seguridad y calidad de vida en las ciudades», subrayó.
La propuesta fue turnada a la Comisión de Asuntos Político-Electorales para su análisis y discusión.