Dr. Rafael Vela Martínez
De acuerdo con la información dada a conocer por la Secretaría de Finanzas y Planeación (SEFIPLAN) el proyecto de presupuesto para el 2024 que será entregado al Congreso Legislativo de Veracruz, considera 163 mil millones de pesos, que significa 15 mil millones de pesos más que los establecidos para el 2023.
Según el titular de la dependencia el proyecto de presupuesto para el 2024 refleja aumentos para la mayoría de las dependencias y organismos autónomos, lo cual deja entrever una pequeña luz al final del túnel en relación al 4% del presupuesto general que debe entregar a la UV.
En contraparte, se dio a conocer por el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP) de la Cámara de Diputados, que la Federación reducirá el presupuesto para Veracruz en el 2024, ya que recibirá 6 mil millones menos: el monto será de 257 mil 761 millones de pesos, esto se refiere al gasto que ejerce la Federación en la entidad a través de sus dependencias centralizadas como el IMSS, ISSTE, Secretaría del Bienestar, SEDATU, entre muchas otras más.
Lo preocupante del gasto federalizado en la entidad es que el informe señala que, de cada 100 pesos del presupuesto, 56 pesos se usan para el gasto corriente en Veracruz; es decir, pago de nómina, lo cual advierte de la ineficiencia de aquellas dependencias federales que tienen la responsabilidad de promover el desarrollo, ya que registran un exceso de personal contratado. De hecho, 153 mil 263 millones de pesos serían para servicios personales, que implica pago de nómina, compensaciones y prestaciones a los trabajadores; 61 mil 702 millones de pesos para pensiones y jubilaciones de quienes trabajaron en la administración pública federal.
En lo que corresponde a inversión para el desarrollo, solamente se han considerado 18 mil 281 millones para programas y proyectos de inversión y 21 mil 479 en obras de inversión; al analizar la estructura de este presupuesto a detalle, se advierte que el Paquete Económico 2024 no incluye recursos destinados a programas y proyectos de inversión en Veracruz en áreas como agricultura, desarrollo rural y turismo; es decir no se prevé inversión del gasto federalizado en la entidad en proyectos productivos e infraestructura estratégica para el desarrollo.
Regresando nuevamente al análisis del Proyecto de Presupuesto 2024 que SEFIPLAN planteará esta semana al Congreso Legislativo, se esperaría que se atendieran con fuertes recursos, programas y proyectos innovadores, al menos las siguientes áreas estratégicas para el desarrollo:
1.- Programa estratégico para capitalizar el Proyecto Interoceánico Coatzacoalcos- Salina Cruz y generar empleos, así como crecimiento económico.
2.- Entregar a la UV el 4% del recurso total a ejercer en el 2024, para que ésta pueda enfrentar los retos de cerca de 1,000 jubilaciones pendientes; que han impedido que nuestra Máxima Casa de Estudios se renueve con gente joven y talentosa, que por falta de espacios migran a otras universidades del país y del extranjero para convertirse en grandes científicos; pero incluso para solventar las graves carencias que enfrentan los universitarios; estudiantes, docentes, trabajadores administrativos y de confianza e investigadores (Ojalá y Rectoría y/o el Consejo Universitario retome la propuesta de levantar un censo para conocer las carencias que se registran en la universidad).
3.- Invertir significativamente en el sector alimentario: tanto en el subsector agropecuario, como en la agroindustria, pues somos un estado con grave dependencia de alimentos de consumo humano, Inseguridad Alimentaria, y también se carece de una estructura agroindustrial, la cual se refiere a las actividades que van desde la producción, transformación, distribución y comercialización de productos alimentarios y no alimentarios, derivados del sector agrícola.
4.- Carreteras y vías de comunicación integradoras por Regiones Metropolitanas (visión para el desarrollo urbano-rural), para capitalizar la liquidez dineraria que se concentra cada 15 días en las Zonas Metropolitanas (ZM) del estado, y así poder desplegar una estrategia de combate a la pobreza de las áreas rurales con base en un programa de organización social para el desarrollo, centrado en actividades productivas y el conocimiento que se tiene de la demanda por consumo doméstico de la población que vive en ZM.
Estas propuestas no son nuevas, durante los últimos 5 años se han venido reiterando; se han discutido en foros con expertos académicos y empresarios, y la gran mayoría coincide en que estas propuestas son radicalmente importantes de llevar a cabo, para realmente lograr el desarrollo de la entidad; lamentablemente nuestros gobernantes prestan oídos sordos a nuestras propuestas, y en estos momentos todo apunta a que estos recursos extraordinarios se van a aplicar a cuestiones electorales para garantizar la permanencia del grupo en el poder.
Justamente porque solo se piensa en los intereses de quienes gobiernan, y no de los veracruzanos, es que seguimos en la entidad con un promedio de educación de 8.7; una población con actividades económicas informales de más del 60%; incluso, de acuerdo con el Informe de CONEVAL, para el 2022 se registraron 4 millones 38 mil veracruzanos sin acceso a los servicios de salud; y, de acuerdo con el mismo informe, se ubicó a Veracruz entre las cinco entidades con el mayor porcentaje de población en situación de pobreza extrema con un 11.4 por ciento, por citar algunos indicadores que dan cuenta de la ineficiencia gubernamental en 5 años.
