Calores y terrores políticos

Eduardo Meraz

Más allá de establecer una correlación entre calor y delitos, como arguyen los cuatroteístas, debe esclarecerse la sinergia existente en tiempos electorales entre Palacio Nacional y el crimen organizado.

Los hechos de violencia, amagos, amenazas, ataques y homicidios contra políticos y candidatos de todos los colores en el actual proceso electoral dan la razón al estudio donde se afirma que México es el país con el “índice de terror político” más alto de toda la región de Latinoamérica y el Caribe.

Pero la explicación científica de este elevado clima de inseguridad en buena parte del territorio nacional ofrecida por el presidente palaciego consiste en menos violencia pero más asesinatos.

Asimismo, el deudor mala paga e ideólogo del cuatroteísmo, Epigmenio Ibarra, hace suyas las palabras de la presidenta municipal de Acapulco, Abelina López Rodríguez, quien atribuye a “la calor” el aumento en crímenes y delitos.

Sin embargo, tales justificaciones, además de sumamente rupestres, en realidad tratan de justificar la inacción gubernamental para combatir a los grupos delincuenciales que, por sus elevados indicadores, refieren a la existencia de colusión, en beneficio mutuo.

Tal sinergia entre el cuatroteísmo y las bandas de criminales, genera inquietud no sólo entre los mexicanos, sino entre los participantes en el actual proceso electivo y el gobierno estadounidense.

De acuerdo con un estudio elaborado por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID, por sus siglas en inglés), dicho nivel de violencia -cuatro de cinco en la escala- obedece a violaciones de los derechos civiles y políticos que se extienden a gran parte de la población.

Los asesinatos las desapariciones y la
tortura son algo común en la vida diaria. El terror en este nivel afecta principalmente a aquellos que se interesan por la política, señala el estudio referido.

La USAID define la Escala de Terror Político (ETP) como las violaciones a los derechos humanos básicos y a la integridad física de una persona por parte de agentes del Estado dentro de los límites territoriales de cada país.

La puntuación de México prácticamente se ha mantenido sin cambio desde 2016. Según el ranking de la USAID, nuestro país es el número uno en toda la región y el número 17 a nivel mundial. Condición que comparte con naciones como Brasil y Venezuela.

Ante este “terror político” en el que nos encontramos, el cuatroteísmo mira para otro lado. Y como afirma Luis Donaldo Colosio Riojas, los altos índices de violencia e inseguridad que se viven en el país, este gobierno se caracteriza más por sus afanes de venganza que los de justicia.

Pero no sólo eso, sino que se está en una etapa en la cual “la calor” influirá en los pactos que deberán renovarse, en caso de un triunfo de la bastonera del oficialismo.

He dicho.

EFECTO DOMINÓ
El clima político ardiente está afectando mayormente a los candidatos de Morena, pues cada vez es más frecuente los traicione el subconsciente.

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