Habemus “dictadura perfecta”
Eduardo Meraz
Este 5 de noviembre quedó sellado el atraco a la voluntad de los ciudadanos, gracias a la “irresponsabilidad” de magistrados del Tribunal Electoral y ministros de la Corte, al dar cabida a la anulación del poder judicial, por así decirlo.
En lugar de formar parte de los Estados Unidos Mexicanos, a partir de mañana empezaremos a identificarnos como “estamos jodidos mexicanos”.
La vigencia de la reforma judicial y la impugnabilidad de cambios constitucionales promovidos por el oficialismo, les otorgan todo el poder de cancelar los derechos humanos de la población.
La supuesta intención de combatir la corrupción y el nepotismo del que se acusaba a jueces, magistrados y ministros, se encuentra mayormente generalizado en todas las esferas de los tres niveles de gobierno, fue el pretexto.
Las riquezas y posiciones de integrantes de las “famiglias” de los principales cabecillas de Morena y aliados, son claro ejemplo de la mentirosa separación de los poderes económico y político.
En realidad, se trata de la instauración de la auténtica “dictadura perfecta”, al desaparecer el equilibrio de poderes. En lugar de tres, ahora sólo tendrán plena vigencia el Ejecutivo y el Legislativo.
En lo sucesivo, con “intermitencias técnicas” o sin ellas, la tiranía de curulecos y escañeros -diputados y senadores- se apresta a dictar qué podemos o no hacer. La prisión preventiva oficiosa, como en Cuba, Venezuela o Nicaragua, pende sobre la cabeza de quien se oponga o proteste.
Atrás quedaron los poderes “meta constitucionales” inherentes al presidencialismo en nuestro país. Ahora, si quiere gobernar, la titular del ejecutivo, tendrá que compartir tales facultades con la “supremacía” legislativa.
Los nombres de los consejeros y magistrados electorales, legisladores y ministros abdicantes de su responsabilidad, a fin de defender privilegios personales y de grupo, serán recordados por su contribución a la extinción del sistema republicano.
Para nuestra desgracia, la “letalidad legislativa” seguirá su curso y aumentará exponencialmente el precarismo de los mexicanos en materia de derechos fundamentales.
Me gustaría estar equivocado, pero los nuevos rasgos del “humanismo mexicano” son ominosos.
He dicho.
EFECTO DOMINÓ
Así se resumen la separación del poder político del poder económico en el cuatroteísmo:
Entre 2019 y septiembre de 2024, las ganancias acumuladas de los bancos sumaron un billón 178 mil 323 millones de pesos, las más altas de la historia. En cambio, en el sexenio de Enrique Peña Nieto, los bancos obtuvieron utilidades por 698 mil 374 millones de pesos, de acuerdo con las cifras oficiales de la CNBV.
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