• Fue una Elección Casi Impecable

• No Faltaron Abusos y Trampas

• Reformas Necesarias y Urgentes

Por Francisco Javier Hernández

Sin duda, los mexicanos vivimos en una actividad política intensa, pues después de un proceso electoral casi perfecto, pasamos a la discusión de temas torales para la nación, como la Reforma al Poder Judicial, y, al mismo tiempo, vemos asomarse al escenario público a aquellos primeros personajes que han sido elegidos para conformar el gabinete de la primera Presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo.

Y decimos que fue un proceso comicial casi perfecto porque todavía hay quienes insisten que fue una “elección de Estado”, cuando todo el tiempo el INE sobre vigiló que Andrés Manuel López Obrador, como Presidente de México, no se expresara a favor de uno –una, diríamos—y otra candidata y solo se animó a llamar al voto.

Pero además no ha faltado quien diga que hubo una masiva compra del voto a favor de Morena, cuando en los hechos se descubrió una y mil maniobras en este intento por parte de grupos opositores lo cual se vio reflejado en resultados como en el estado de Jalisco, todavía impugnado, o bien en la Delegación Cuauhtémoc donde al parecer hubo una engañosa elección.

Cierto que todavía a los mexicanos nos falta admitir que un proceso tan grande se haya llevado de la mejor manera, pero a como estaban ocurriendo las elecciones en un pasado reciente, aquí hubo mucha diferencia. Cierto hubo víctimas mortales, pero fueron las menos.

Es más, la señora Xóchitl Gálvez quizá debiera agradecerle a Andrés Manuel la promoción que le hizo y no estar buscando que sea amonestado y casi destituido del encargo, porque gracias a él y sus continuas referencias, la gente la conoció, pero también supo que estaba errada al pretender descalificarlo ya sea con insultos e inadmisibles calificativos. Y ahora lo pretende demandar por “traición a la patria”, lo que es juntarse con Marko Córtes.

Y es que la gente optó por quien siempre tuvo propuestas y no descalificaciones, pues ya estaba harta de tanta mentira y vesania con la que se referían no solo contra Andrés Manuel, sino contra Claudia Sheinbaum quien siempre mantuvo la calma.

Ahora falta saber que dice el TRIFE que es la última aduana para reconocer la elección y ojalá ponga en claro quién o quiénes incurrieron en verdaderas faltas durante la elección.

Mientras tanto, viene la discusión sobre los temas de las reformas propuestas por Andrés Manuel y qué han sido vapuleadas por un sinnúmero de personajes quienes al parecer no conocen su contenido, pero sí están dispuestos a desestimarlas.

El asunto es armar polémica sobre todo en lo que se refiere a la reforma al Poder Judicial, tan echado a perder en los últimos sexenios y que en estos años ha sacado el cobre no solo por desacatar un mandamiento constitucional como el percibir un salario menor a lo que percibe el Jefe del Ejecutivo, sino disponer de todos los instrumentos para darle revés a asuntos tan delicados como la libertad a presuntos delincuentes.

Claro está que de ello se ha dado cuenta la población en general, de ahí que alrededor del 80 por ciento de los mexicanos han expresado su apoyo a las reformas propuestas, pues aunque se diga que al ciudadano común no conoce de estos asuntos, sería bueno que se visualizara lo que realmente piensa la gente de este y otros temas de interés.

Pero ahí están los medios que en lugar de informar en qué consisten tales reformas, lo que buscan son opiniones en contra para así armar polémicas innecesarias o temas para discutir.

Mientras, Claudia Sheinbaum, en su papel de Presidenta electa, ya dio a conocer los primeros seis nombres de quienes la acompañaran en su primer tramo de gobierno y son personajes altamente conocidos, salvo dos o tres excepciones.

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