¡Cese al fuego, Kiev-Moscú!

Jarocho: El mandatario ruso Vladimir Putin se dijo dispuesto a reunirse en cualquier momento con su homólogo electo de Estados Unidos Donald Trump, que recientemente reclamó un alto al fuego como Rusia y Ucrania negocien una salida al conflicto.

“No sé cuándo voy a verlo, en cualquier momento”, dijo el presidente ruso en su conferencia de prensa. Una larga rueda de prensa, retransmitida en directo pero muy controlada, es una de las pocas oportunidades que tienen los periodistas rusos de plantear preguntas delicadas al presidente Putin. La emisión, que este año duró casi cuatro horas y media fue un mes antes de que Donald Trump regrese a la Casa Blanca. El republicano prometió en su campaña electoral poner fin al conflicto ruso ukraniano y llamó a un alto el fuego inmediato como un diálogo.

Pero europeos y ucranianos temen que Trump pueda forzar a Kiev a aceptar la paz con Putin, pero cediéndole los territorios que ya tiene invadidos y hacer grandes concesiones, dándole una victoria geopolítica a Putin. “Si algún día nos reunimos con el presidente electo Trump, estoy seguro de que tendremos mucho de qué hablar”, dijo Putin quién aseguró que Rusia está dispuesta a un diálogo con Ucrania, pero solo si este se basa en la realidad en el terreno, dando a entender que su país no devolverá los territorios conquistados.

El mandatario rechazó cualquier tregua, considerando que un alto al fuego permitiría que el ejército ucraniano se rearme. Putin se mostró confiado, considerando que, en el frente en Ucrania, sus tropas están ganando terreno a un ritmo que no se veía desde principios de 2022. Admitió que no puede dar una fecha precisa de cuándo logrará su ejército expulsar a las fuerzas ucranianas de la región rusa de Kursk, de las que controlan una pequeña parte desde agosto, gracias a una ofensiva la más importante ocurrida en territorio ruso desde la Segunda Guerra Mundial, causa preocupación en Putin, que quiere convencer a la población de que la ofensiva en Ucrania no tiene ningún impacto en el día a día de los rusos.

Putin también sugirió que Moscú debería lanzar antes su ofensiva contra Ucrania, sugiriendo que el país no estaba lo suficientemente preparado para una campaña militar que se prolongó desde hace tres años. Putin presumió su nuevo misil ruso Oreshnik, un arma moderna capaz de transportar carga nuclear y con un alcance de miles de kilómetros. Rusia utilizó ese misil por primera vez el 21 de noviembre, contra la ciudad ucraniana de Dnipro, en respuesta, según Putin, a bombardeos ucranianos en territorio ruso con misiles estadounidenses y británicos.

En Washington: Mientras, los republicanos con mayoría en el congreso acordaron presentar un nuevo plan de financiación para evitar la parálisis presupuestal del Estado, después de que el presidente electo, Donald Trump y su ahora asesor Elon Musk, rechazaran un acuerdo bipartidista. Esta vez Trump apoyó con vehemencia la propuesta, que aborda las sugerencias de Musk, su “zar de la eficiencia”, como ahora lo llama. “Es ridícula la propuesta, no es seria, es de risa” dijeron los republicanos extremistas de MAGA (partidarios de Trump).

Trump en cambio elogió el proyecto de Musk, con facciones de su propio partido.Con los demócratas en su momento empecinados en avanzar con el acuerdo anterior, rechazado por Trump, el peligro del llamado “shut down” (cerrar) aunque superado fue visible. Ese desenlace como cerrar todo tipo de oficinas federales y potencialmente enviar a casi a un millón de trabajadores a su casa sin sueldo durante la Navidad fue la primera llamada.

A pesar de que es una disputa habitual de cada fin de año y a que se tomaron meses de negociaciones, los legisladores esta vez no lograron ponerse de acuerdo sobre el presupuesto anual de 2025. La versión bipartidista que se presentó antes mantenía el funcionamiento del Estado hasta mediados de marzo. Musk, un importante donante y ahora aliado cercano de Trump, se dedicó el miércoles a bombardear a sus 208 millones de seguidores en X con publicaciones criticando el acuerdo. Por su parte, Trump, exigió que el proyecto de ley aumentara o incluso eliminara el límite de deuda del país.

El nuevo texto mantiene a las agencias federales en funcionamiento hasta mediados de marzo, dijo Trump, pero permite al gobierno seguir endeudándose sin pasar por el Congreso durante dos años. Además, destina 110,000 millones de dólares en ayudas para catástrofes naturales.Las discusiones sobre aumentos en el límite de endeudamiento federal normalmente toman semanas. Con esa perspectivael anuncio más reciente de Trump parecería insuficiente para convencer a los legisladores de dar el visto bueno. Los demócratas, que actualmente controlan el Senado, tienen pocos incentivos políticos para darles una mano a los republicanos e insisten en que solo votarán por el paquete acordado primer lugar, lo que significa que el partido de Trump tendrá que hacerlo por su cuenta. Trump expresó su frustración por los niveles de gasto, pues su principal objeción tiene que ver con que el Congreso lo estaba dejando a cargo de gestionar un aumento del límite de la deuda, una batalla onerosa, en lugar de incluirlo en el texto.