Delgado vs INE
Por: Federico La Mont
Mario Delgado, presidente de Morena, ya se convenció que en la Comisión de Quejas y Denuncias del INE, que preside la prima de Margarita Zavala, la consejera Claudia Zavala, los dados están cargados para perjudicar a Morena.
Para muestra, nos informó Mario, están los spots de campaña de Xóchitl Gálvez, repletos de calumnias. Se trata de una de las tantas maniobras de cómo opera al interior del INE el grupo de los “seis consejeros cordovistas”, una herencia de Lorenzo Córdova, formado, además de la consejera Zavala, por Arturo Castillo, Dania Ravel Cuevas, Jaime Rivera, Martín Faz Mora y Carla Humphrey. En el INE persisten áreas administrativas relevantes operadas por un grupúsculo que construyeron Lorenzo Córdova Vianello, Ciro Murayama Rendón y Edmundo Jacobo Molina.
La consejera presidenta, Guadalupe Taddei, no ha asumido el control pleno del INE, por las expectativas de obstrucción o descarrilamiento que mantienen algunos segmentos administrativos que Lorenzo Córdova dejó “sembrados” y que podrían generar problemas e irregularidades que les caerían de perlas para promover acciones de anulación que serían resueltas en última instancia por el Tribunal Electoral.
Esos seis consejeros “cordovistas” son los que presionaron para que el INE llegara a las elecciones del 2 de junio con la Secretaría Ejecutiva y 10 direcciones generales con encargados de despacho, porque impidieron que la presidenta, Guadalupe Taddei, designara a los nuevos titulares definitivos y dejar todo en manos de una maquinaria operada a distancia, por el siniestro “doctor Córdova”.
Todo un plan muy calculado para descarrilar el proceso electoral, habrá que estar muy atentos. Si el trabajo del INE logra salir bien y supera esos graves obstáculos, será gracias al empeño de la presidenta Guadalupe Taddei y los consejeros Jorge Montaño, Rita Bell, Norma Irene de la Cruz y Uuc-Kib Espadas. Si le buscamos un poquito más, hallaremos el motivo de la falta de personal en áreas sustantivas que se está remediando a marchas forzadas. Tiene nombre Lorenzo y el apellido Córdova.
Memorable la patinada de Xóchitl Gálvez cuando presentó los resultados de una encuesta de Banamex que la pone un punto arriba de Claudia Sheinbaum. En cuestión de horas la institución la desmintió, y como hizo mucho ruido, la metida de pata se difundió a toda velocidad en los principales medios y Xóchitl, como siempre, se hizo la chistosa.
Los grupos parlamentarios de Morena y el PT en la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, exigieron la renuncia inmediata de la presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Piña, por quebrantar la autonomía del Poder Judicial, extorsionar a los magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) e intervenir en el proceso electoral del 2 de junio.
En la sesión del pasado miércoles 15 se denunció en tribuna la ministra Piña organizó una reunión de los magistrados electorales Felipe de la Mata, Felipe Fuentes y Mónica Soto con el presidente del PRI, Alejandro “Alito” Moreno Cárdenas.
El encuentro, efectuado el 12 de diciembre pasado, tuvo lugar en la residencia particular del ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá. Asimismo, se denunció que dicha reunión fue la primera de muchas en las que ha participado la ministra Piña y en las que el ministro González
Alcántara ha fungido como operador para coordinar a los partidos PRI y PAN con integrantes de la sociedad civil, académicos e intelectuales considerados como adversarios al presidente López Obrador.
Como parte de estos trascendidos, se dieron a conocer amenazas de la ministra Piña al magistrado Felipe Fuentes, que desembocaron en la renuncia de Reyes Rodríguez Mondragón como presidente del Tribunal. Se dijo que la ministra extorsionó al magistrado Felipe Fuentes con el propósito de sostener al frente del TEPJF a Reyes Rodríguez, plenamente identificado por haber sido asesor del secretario particular de Felipe Calderón.
Ni la ministra Piña ni los magistrados del TEPJF han explicado por qué se reunieron con el líder nacional del PRI, cuando ya se encontraba en marcha el proceso electoral. De acuerdo con la información disponible, los integrantes del Tribunal Electoral no sabían que Moreno Cárdenas asistiría a la casa de González Alcántara, pero ello no los exime de justificar por qué acudieron a un cónclave clandestino.
En la Comisión Permanente se dijo que tras la acumulación de evidencias de sus maniobras ilegales para interferir en los comicios del 2 de junio, la ministra Piña Hernández y el ministro González Alcántara deben renunciar de manera inmediata a sus cargos, pues de otro modo empeorarán de manera sustancial el descrédito de la Suprema Corte, lo que a su vez representaría un factor grave e injustificable de zozobra política.
Si no pueden ofrecer una explicación convincente de por qué asistieron a esa reunión y qué hablaron en ella, los magistrados del TEPJF también tendrían que presentar sus renuncias a fin de permitir un desempeño sin sospechas de la institución de la que forman parte.
La estabilidad del proceso comicial que está por terminar demanda instituciones limpias, sólidas y libres de toda suspicacia. Desde la tribuna de la Comisión Permanente, Morena y sus aliados exigieron la renuncia inmediata de la presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Norma Piña, por quebrantar, advirtieron, la autonomía del Poder Judicial, intimidar a los magistrados del Tribunal Electoral e intervenir en los comicios del 2 de junio.
Hay razones suficientes para que deje el cargo, sostuvieron los diputados Juan Ramiro Robledo y Hamlet García Almaguer, quienes resaltaron que violentó la ética judicial con la reunión que sostuvo en un domicilio particular con los magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), en diciembre pasado, a la que se convocó también al dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas.
A los legisladores del PAN y PRI les indignó que Morena planteara la salida de la presidenta de la Corte e incluso armaron una gritería cuando el diputado del PT Benjamín Robles Montoya manifestó desde el pleno que la ministra Norma Piña, más que jurista, parece una extorsionadora y lo que quiere es encabezar un cártel judicial.
Desde antes de la sesión, Morena y PT ofrecieron una conferencia de prensa en la que anunciaron que presentarían un punto de acuerdo para demandar la renuncia de la presidenta de la Suprema Corte, recurso que fue turnado a comisiones, pero los legisladores de Morena y del PT llevaron el tema a la tribuna.
El diputado Robledo, presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales en San Lázaro, advirtió que Norma Piña violó el artículo 109 de la Constitución, al interferir en el TEPJF, donde no tiene jerarquía ni injerencia administrativa, por lo que al tratar de presionarlos y reunirlos con uno de los actores políticos del proceso electoral en marcha, faltó a la imparcialidad, a la legalidad y la honradez a que está obligada.
Ese artículo, el 109, recalcó, establece la suspensión, inhabilitación o destitución del funcionario que afecte los intereses públicos, pero ni amonestación ni suspensión son sanciones del tamaño de la infracción cometida por la ministra Piña.
Por su parte, el diputado García Almaguer resaltó que además de presionar e intimidar a los magistrados del TEPJF, como se prueba en los mensajes electrónicos que la ministra Piña les envió por la madrugada, “está haciendo campaña a favor de la aspirante presidencial del PRI y del PAN desde su posición de presidenta de la Suprema Corte.
La senadora panista Kenia López Rabadán, integrante del equipo de campaña de Xóchitl Gálvez, salió en defensa de la ministra Piña y sostuvo que se trata de una campaña de acoso. Se lanzó en contra del ministro en retiro Arturo Zaldívar, quien, aseguró, hace campaña en favor de la candidata de Morena, Claudia Sheinbaum.
Desde el pleno, el diputado Robles Montoya le respondió que es totalmente distinto, porque Zaldívar se separó del cargo y, por ello, la actual presidenta de la Corte debe renunciar, “para que así pueda defender los intereses con los que simpatiza ya de manera abierta y no en lo oscurito”.
Advirtió que “el pueblo de México sigue esperando la explicación de la ministra Piña sobre esa reunión a la que convocó a magistrados electorales en momentos en que se discutía la remoción del entonces presidente del TEPJF, Reyes Rodríguez, y de forma sorpresiva invitó también al dirigente del PRI, Alito Moreno, a quien se ha referido como su gran amigo y aliado”.
“Actuó como cabildera del dirigente del PRI. Ahí está la independencia del Poder Judicial, que tanto defiende la oposición y lo hacen porque se ha convertido en su comparsa y cómplice en contra de un gobierno democráticamente electo”, recalcó.