Por: Giovanna Montero
La música es un arte, que constantemente esta evolucionando trayendo nuevos ritmos y letras que identifican a generaciones o que representan a un sector de la población, ahí es donde entra el reguetón, que es un género que se ha popularizado en los últimos años dentro de la comunidad más joven, que tiene ritmo y letra bastante pegajosa, pero frases polémicas.
Así como afirma Rubén Gómez (2007) «la música es un producto socio-cultural, pues al mismo tiempo que es un medio de comunicación al constituir una manifestación artística contribuye a la construcción social de la realidad”. Entonces la música es un producto social y cultural que aporta a la representación de la realidad, lo que se entiende con métodos de expresión oral como este.
Las personas mayores o ciertos adultos critican la música del reguetón como sexista, vulgar y machista, ya que tiene frases que podrían poner a la mujer como un objeto sexual como la frase de «que rico te mueves hija de tu p..a madre» en la canción de Dani Flow, y así hay ejemplos más abruptos.
Sin embargo, se popularizó este tipo de música en fiestas y reuniones en los jóvenes principalmente por su ritmo y su singular manera de bailar, pero se vuelve una contradicción con las luchas sociales que se tienen hoy en día como el feminismo y la lucha LGBT+, que son movimientos propios de los adolescentes. Aunque si bien no es que apoyen esta música, es inevitable no escucharla en su entorno, y se dejan guiar por el ritmo tan pegajoso.
Todos los géneros musicales a lo largo de la historia han sido criticados como el reguetón, y no se debe satanizar cierta música, pues solo es una canción, pero tenemos que tener en cuenta que aunque podría retratar la realidad, no significa que todos o la mayoría de jóvenes están de acuerdo con lo que la música expresa, sino se guían con lo que les transmite por el ritmo y el modo festivo en que se posiciona.