El rezago económico de Veracruz tiene que ver con la falta de planeación en Zonas Metropolitanas

Rafael Vela Martínez

Las Zonas Metropolitanas (ZM) tienen una importancia económica significativa a nivel mundial por varias razones; entre ellas, la concentración de actividades económicas, ya que son puntos donde se localizan la mayoría de las unidades económicas, principalmente de servicios y del comercio, ya que las industrias hace varias décadas dejaron de instalarse en las ciudades, ahora lo hacen en su periferia, como resultado de los avances tecnológicos aplicados al proceso de producción que lo fragmentó y dio origen al surgimiento de distritos y parques industriales, así como a la generación de maquiladoras, donde actualmente  se producen partes de un bien final; a esto se conoce hoy en día como la producción flexible; esto facilita la eficiencia y la productividad debido a la proximidad entre negocios y mercados.

La generación de empleos es otra característica de las ZM, ya que la alta densidad de población y la diversidad de negocios crean una amplia gama de oportunidades laborales. En estas urbes tiende a coincidir, en los países desarrollados, no en el caso de Veracruz, la innovación y el desarrollo tecnológico, ya que las universidades y centros de investigación que se localizan en ellas se vinculan con empresas tecnológicas, lo que fomenta la innovación y el desarrollo de nuevas tecnologías. La interacción entre academia e industria es más fluida, acelerando el progreso tecnológico. 

Aquí en Veracruz, los últimos rectorados de la Universidad Veracruzana (UV), incluyendo el actual, y salvo el rectorado del Dr. Raúl Arias Lovillo, han carecido de esta visión; por el contrario, más han parecido administradores que personalidades visionarias con un proyecto académico, de desarrollo en investigaciones tecnológicas que, en esencia, consiste en el estudio sistemático y  la aplicación de conocimientos científicos y habilidades técnicas para desarrollar soluciones innovadoras a problemas prácticos mediante el uso de tecnologías. Es decir, se trata de obtener conocimiento para resolver problemas o necesidades de la sociedad; en particular, orientadas a fortalecer el proceso productivo y apalancar el desarrollo de la entidad y bienestar de los veracruzanos.

En su caso, una característica de las ZM es que cuentan con una eficiente infraestructura avanzada y los servicios son de alta calidad, como el transporte, las telecomunicaciones y servicios financieros; nuevamente esto no sucede en Veracruz; si así fuera, habría más inversiones, actividad comercial y logística; ya que la alta densidad de población en las ZM crea mercados de consumo grandes y diversificados. Esto incentiva a las empresas a establecerse en estas áreas para aprovechar el acceso a una amplia base de clientes.

Ya que a nivel mundial, no en el caso de Veracruz,  las ZM suelen atraer inversiones extranjeras directas (IED) debido a su potencial de crecimiento, su infraestructura desarrollada y su capacidad para ofrecer un entorno favorable para los negocios, sería recomendable que el nuevo gobierno de Veracruz capitalizara este potencial, pues hay ZM en la entidad que están situadas cerca de puertos, aeropuertos y otras infraestructuras claves para el comercio internacional, lo cual facilita las exportaciones e importaciones y conectarían a Veracruz con mercados globales.

El estado de Veracruz es la entidad que cuenta con el mayor número de ZM en el país, en el 2023 se le reconocieron 7 ZM: Poza Rica, Xalapa, Veracruz, Orizaba, Córdoba, Minatitlán y Coatzacoalcos. Actualmente las ZM abarcan 45 de los 212 municipios del estado y en ellas se genera, en promedio, el 80% del PIB estatal anual; lo ideal sería que realmente participaran todos los municipios metropolitanos en esa generación de riqueza, pero en realidad solamente en 7 de los 45 municipios que integran las ZM, es donde se produce dicho capital, por lo que se puede afirmar la existencia del fenómeno llamado MACROCEFALIA ECONÓMICA.

Veamos con detenimiento este fenómeno: la generación de riqueza en los nodos urbanos centrales de cada ZM de Veracruz, como se ha afirmado, se concentra prácticamente toda la dinámica económica estatal; así el municipio de Poza Rica domina con un 88% toda su ZM respectiva; el municipio de Xalapa condiciona con 79 % su correspondiente ZM; el municipio de Veracruz lo hace en un 78%; Orizaba, la mejor ZM planificada económicamente de la entidad, lo hace en un 53%, pues afortunadamente ha contado con presidentes municipales que saben escuchar y actuar; en contraparte, Córdoba no ha seguido el ejemplo de Orizaba que desde hace más de 20 años venimos asesorando, y debido a que sus gobernantes han mantenido oídos sordos, enfrenta la macrocefalia en un 80%; por su parte el municipio de Minatitlán incide en un 82% en toda su ZM; y, Coatzacoalcos lo hace en un  94%.

Son claras las causas del por qué la entidad veracruzana no crece teniendo tanto potencial económico; las ciudades medias, que son aquellas concentraciones poblacionales de más de 100 mil habitantes, y que precisamente son los nodos centrales de las ZM, tienen encapsulado el crecimiento económico del estado; insisto, esto a consecuencia de que no ha existido una planeación económica urbana; incluso, hay más de 5 entidades en el país que, con menos ZM que Veracruz, le otorgan mayor importancia al potencial económico urbano, al contar con una secretaria de Zonas Metropolitanas y Desarrollo Urbano; en contraparte, aquí en Veracruz, ese potencial ha sido desdeñado, o quizás ni siquiera vislumbrado por los gobernadores del PRI, del PAN y de MORENA, todos igualmente limitados y de oídos sordos para planificar el desarrollo económico de Veracruz; todos ellos, en gran medida, son los culpables de que exista tanta pobreza, empleos de baja calidad y mal remunerados en la entidad. Ojalá y este nuevo gobierno cuya administración inicia en diciembre, sea diferente, por el bien de los pobres, de los veracruzanos en general y de las nuevas generaciones de jóvenes con cuyo voto pusieron su futuro en manos de los nuevos gobernantes.

Solo con el ánimo de documentar más este fenómeno económico no resuelto y no capitalizado por los gobernantes, habría que señalar que de 126,910 Unidades Económicas (UE) que existen en las CD Medias de la entidad, hay 107 mil 649 que son microempresas, que cuando más tienen 5 trabajadores considerando al dueño, lo que representa el 84.8% del total: en el caso de las ciudades intermedias, que son 19 en la entidad y que son aquellas ciudades que tienen más de 30 mil habitantes y menos de 100 mil, de 69 mil 331 UE, 62 mil 326 también son microempresas, lo que representa el 89.9% del total. Es de comentarse que en las ciudades medias e intermedias se concentra más del 60% de la UE de la entidad, así como aquellas de mayor tamaño.

A nivel de corolario, se puede afirmar que en 27 municipios de los 212 se concentra el 60% de las Unidades Económicas que existen en la entidad; el restante 40% de las UE se localizan en 185 municipios y tienden a ser de menos tamaño. Para ser más enfático, del total de las UE o negocios que existen en Veracruz, el 88.63% son microempresas y tiene cuando más 5 trabajadores; el 5.65% son empresas que tienen entre 6 y 10 trabajadores; el 4.05% son negocios que tienen entre 11 y 30 personas contratadas; el 0.75% tienen entre 31 y 50 trabajadores; el 0.49% tiene más de 51 trabajadores; y así siguen las fracciones menores a la unidad en cuanto a tamaño de los negocios: esa es nuestra triste realidad.

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