Con aplausos y un sentido homenaje de cuerpo presente en el patio central del palacio municipal, José Abraham Aldeco Cosme, un policía municipal de 32 años, fue despedido.
Su fallecimiento representa una dolorosa pérdida para la Dirección General de Seguridad Ciudadana y Movilidad Segura de Naucalpan, siendo el segundo elemento que pierden este año mientras cumplía con su deber.
Pablo Francisco Rosas Olmos, director general de Seguridad Ciudadana y Movilidad Segura municipal, destacó el valor de policías como José Abraham, quienes enfrentan la delincuencia con determinación. Enfatizó que en Naucalpan han comprendido que la estrategia de «abrazos y no balazos» no ha dado resultados y, en cambio, les ha arrebatado a un valioso compañero.
Haciendo un llamado a la sociedad, Rosas Olmos instó a recuperar el tejido social y fortalecer el núcleo familiar. Recordó que, hace unos meses, un menor de edad arrebató la vida a otro valioso compañero y ahora un adulto vulnera a la sociedad.
Rubén Fernández Aceves, coordinador de Estrategia de Seguridad de Naucalpan, destacó que cada uniforme de la corporación representa a un ser humano dedicado a su comunidad y dispuesto a darlo todo por el bienestar del municipio. Subrayó que el legado de integridad y sacrificio de los policías caídos motiva a redoblar esfuerzos en el combate a la criminalidad.
El homenaje contó con la presencia de familiares de Aldeco Cosme, incluyendo su esposa y sus tres hijos, así como policías municipales, servidores públicos y ciudadanos en general. Rosas Olmos calificó a Aldeco Cosme como un héroe y reconoció que servir a la comunidad y preservar la paz y el orden social es una vocación riesgosa llevada a cabo por hombres y mujeres entregados a su labor, quienes se despiden de sus familias cada día sin saber si regresarán.