Dr. Rafael Vela Martínez

El Presupuesto de Egresos aprobado para el Gobierno del Estado de Veracruz en el año 2024 asciende a 163,133 millones 934 mil, 679 pesos. Este monto supera al de 2023 por 15 mil mdp; en consecuencia, la administración estatal debería haber entregado a la Universidad Veracruzana (UV), por concepto de subsidio estatal 6,525 millones, 357 mil, 387 pesos, que significa el 4% del presupuesto total a ejercer por el Gobierno de Veracruz; sin embargo,  solo está entregando 3 mil 657 millones; es decir, nuevamente  la administración del gobernador Cuitláhuac García Jiménez, le está quedando a deber a la UV; en este caso, la cantidad de  2,868 millones 357 mil pesos aproximadamente; de esta manera, de los  9 mil 524 millones 339 mil pesos que sumados, subsidio estatal y federal, debería disponer la UV, solo le están entregando 6 mil 712 millones de pesos como presupuesto total para satisfacer todos los requerimientos en este 2024. Incluso, haciendo la suma de la deuda de años anteriores, lo que Gobierno del Estado le debe a la UV, rebasa los 4,500 millones de pesos.

¿Quién tiene la culpa de que el Gobierno del  Estado de Veracruz no le entregue todo el presupuesto que por Ley le corresponde a la UV para satisfacer las demandas académicas de investigación, innovación educativa, cobertura de la demanda estatal de jóvenes aspirantes a ingresar a la UV,  oferta educativa en todos los municipios de la entidad, ciencia aplicada al desarrollo tecnológico, inversión en infraestructura (que permanece en condiciones deplorables), cobertura de legítimas demandas sindicales y atender las más de 1000 jubilaciones pendientes, que son necesarias para renovar los cuadros universitarios e impedir que la Institución envejezca académicamente, entre otras funciones sustantivas relevantes?

Un grupo bastante amplio de académicos de diferentes Regiones Universitarias consideramos que hay varios factores que inciden en esta situación tan adversa que enfrentamos los universitarios, tanto jóvenes estudiantes como académicos y personal laboral. Entre las más relevantes menciono las siguientes: en principio, se señala a los tres titulares de las Secretarías más cercanas al RECTOR (sus super asesores): secretaria de Finanzas, secretario Académico y secretaria de Desarrollo Institucional, que no quieren mantener una posición firme en las demandas legitimas ante el Gobierno del Estado acerca del presupuesto, como ha quedado demostrado en reiterados Consejos Universitarios Generales (CUG). Ahí en ese escenario, un servidor, como muchos otros Consejeros Universitarios, tanto Consejeros Maestros como Consejeros Alumnos, le hemos hecho saber al Rector, como a sus secretarios en mención, que cuentan con nuestro apoyo para hacer valer lo que, en derecho y apego a la Ley, corresponde en materia de presupuesto se le entregue a la UV.

En esos CUG, incondicionales de la administración han defendido la postura de Rectoría de “seguir negociando la ley” y no interponer una denuncia legal ante las instancias correspondientes, para que, de ser el caso, llegue hasta la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), pues consideran que eso es ofender a la administración estatal; y con ello, han puesto de rodillas la autonomía Universitaria de nuestra Máxima Casa de Estudios.

El argumento que se ha esgrimido reiteradamente es que la UV tiene presupuesto suficiente para dar cobertura a sus necesidades, afirmación verdaderamente escandalosa cuando viene de estas autoridades, que con ello demuestran que no existe un proyecto académico, y que conocen poco del papel que debe jugar la universidad en el desarrollo de la entidad veracruzana.

Si hay que hablar de escasez y de las precarias condiciones económicas que enfrenta la UV, espero que con breves datos que daré a conocer más adelante, estas autoridades puedan despejar su mente, para darse cuenta de las carencias que enfrenta nuestra universidad; más allá de la obligación que tienen de atender las legítimas demandas del Sindicato Estatal del Personal Académico de la Universidad Veracruzana (FESAPAUV), quien por cierto, en una defensa  digna de los intereses universitarios, llega a sus 48 años de existencia este próximo 22 de febrero; nada más adecuado para celebrar este aniversario, que mantener, como hasta el momento, una posición firme en la representación de las demandas ante la actual administración universitaria.

Debe mencionarse que, a diferencia de la Rectoría, el FESAPAUV sí cuenta con el apoyo de toda la base universitaria que representa, por ello es que, si es necesario llegar a la huelga, se llegará hasta donde se tengan que definir posiciones, pues después de que la RECTORÍA  de la UV ha contenido a la base universitaria en la demanda de exigir al Gobierno del Estado, que entregue el presupuesto que por ley le corresponde, ahora la misma Rectoría dice que  NO cuenta con los recursos económicos y financieros suficientes para cubrir las legítimas demandas sindicales.

Es muy importante precisar que, en todos los espacios de la institución donde están presentes los académicos, ya nos estamos organizando con nuestro sindicato para hacer guardias y cuidar las instalaciones universitarias, en pleno conocimiento que, como siempre lo ha expresado y llevado a cabo la dirigencia del FESAPAUV, el resultado que derive de las negociaciones que se llevan a cabo por parte de nuestros representantes, por ser revisión de CONDICIONES GENERALES DE TRABAJO, tendrán que someterse al escrutinio de la base,  mediante una consulta universal con voto libre directo y secreto, tal y como lo marca la normatividad sindical correspondiente.

Por otra parte, atendiendo a lo mencionado con anterioridad, acerca de las carencias universitarias, se mencionan breves datos.

1. La UV cuenta con 5 presuntas regiones universitarias, pero solo da cobertura directa a 27 municipios de los 212 que existen en la entidad; es decir, al 12.74% de los municipios del estado; y considerando la desintegración funcional entre municipios, debido a la falta de infraestructura carretera, pues cuando más se da cobertura adecuada a 70 municipios; es decir, los jóvenes veracruzanos que radican en más de 140 municipios no tienen posibilidades de estudiar una carrera universitaria en la UV, pues además provienen de las demarcaciones política administrativas más pobres y marginados de la entidad.
2. La UV, con una limitada matricula entre licenciaturas, especialidades maestrías y doctorados, solo satisface el 33.81% de la matrícula universitaria y Tecnológica que actualmente existe en la entidad, sin considerar a los jóvenes que NO estudian una carrera técnica o universitaria por no tener recursos, o un centro educativo cerca, al cual poder asistir.
3. Existen al interior de la UV, 84 instalaciones deportivas (canchas, campos, albercas, etc.) para 88,387 matriculados, lo que en otras palabras significa que hay un espacio deportivo para que realicen esta actividad 1052 alumnos; imaginase usted,  a más de 100 universitarios tratando de jugar básquet bol en una cancha.

• En la UV, se cuenta con 1,651 cubículos para 5,997 académicos, lo que nos da un resultado per cápita de 3.6 académicos por cada cubículo; y así, se quiere alcanzar altos valores de productividad y conocimiento científico de frontera.
• Existe solo 1 clínica universitaria de Salud Reproductiva y Sexual (ubicada en la región Xalapa) para todos los alumnos de la universidad.
• Solo existen 2 albercas universitarias para los más de 88 mil universitarios matriculados.

Y la pregunta es ¿Seguirán las autoridades de Rectoría argumentando que no se necesita más presupuesto para la UV, con tantas carencias documentadas con cifras oficiales?