Xico y el ombligo del mundo

El volcán Xico es una formación geológica sorprendente que data de la época 550 a 650 d.C. y representa un cráter convertido en el principal atractivo de la región. Su nombre «Xico» proviene del náhuatl y significa «ombligo».

El cráter cuenta con 100 metros de altura y 1400 metros de diámetro, lo que lo convierte en uno de los mayores de entre todos los volcanes mexicanos.

Su forma perfecta se debe a que es un anillo de toba, fenómeno geológico que resulta de las interacciones entre el magma surgido de un volcán con el agua.

El volcán fue drenado por los españoles en la época de la Conquista, por lo que del volcán solo se ve el cráter.

A pesar de su belleza, el volcán está siendo engullido por la expansión urbana en constante avance.

El volcán Xico se encuentra en el municipio de Valle de Chalco Solidaridad, en el Estado de México, a 40 km de la Ciudad de México. Está ubicado en medio de la zona volcánica de Chichinautzin y se remonta a la época 550 a 650 d.C.

El volcán estaba rodeado por el Lago de Chalco, en un cuerpo de agua dulce que correspondía al extremo sur de la zona lacustre del Valle de México, que se alimentaba con los escurrimientos de la Sierra Nevada.

Para llegar al volcán Xico se puede tomar un autobús o caminar desde la estación de metro Tláhuac.

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